Rara vez una celebridad toca el tema de la pornografía, pues ver este tipo de contenido profano es algo que no se asocia con un caballero o una dama. Y aunque ya es el año 2022 el tabú sobre consumir porno sigue estando tan vigente como si fueran los años 90. Llegando a ser más aceptado hablar de «mamar culo» y sodomizar que de disfrutar de las acrobacias sexuales de dos o más profesionales pueden ofrecer frente a una cámara.
Y si bien la joven se atrevió a tocar el tema, no le hace un gran favor a la industria para adultos, pues no lo abordó precisamente para tirarle flores. Ella cuenta cómo ver pornografía se volvió una adicción y culpa a la misma de haberla dañado tanto que la hizo incapaz de ponerle límites a su pareja cuando inició su vida sexual. Ese último argumento que salió de los carnosos labios de la cantante, sumado a lo tetona y guapita que se me hace, despertó el morbo en mí y dio rienda suelta a mi imaginación para tratar de figurar las grandes cogidas que le ha de haber dado quien haya sido el degenerado que tuvo la suerte de llevársela a la cama.
Pero usar la imaginación ya es cosa del ayer, cuando contamos con tecnología que esta a niveles que la alquimia solo pudo soñar. Como es la maravilla del Deepfake que hoy nos permite crear una quimera con la carita de la Eilish y el cuerpo de la consentida de este templo.
Quimera Deepfake de Billie Eilish y Gabbie Carter
Jayden Jaymes y su Adicción
Si la viralidad de Lana Rhoades se puede atribuir a los memes de hermanastra con Jayden sería a la legendaria aparición en MTV que catapultó su carrera de manera estratosférica, en ella explica que no era adicta a ver porno sino a hacerla y como le resultaba excitante ver sus tetas rebotar en sus propios videos ya que su cuerpo se estremecía al recordar como se la habían cogido y pensar en que sus fans se masturbaban por ella. El drama y morbo dejó a todos queriendo más de la diosa.
Bola Extra:
Por si no saben quién es Billie Eilish les dejó una canción.
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