El vínculo que tiene la checa Lenna Ross con el porno es, cuando menos, peculiar, ya que filmó una escena en el año 2014 y hasta el 2020, en pleno año pandémico, no volvió a rodar escenas candentes, pero de modo muy puntual. Sin embargo, durante el presente año ha destapado el tarro de las esencias más libidinosas rodando porno duro y sin contemplaciones en los picadores de Praga (AnalVids), además de dejarse ver en los sets de rodaje de Private para marcarse su primer gangbang interracial, que incluye dobles penetraciones con vergas morenas de gran tamaño.
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