En su día, cuando llevamos a cabo la inspección profunda y concienzuda de PornDoe Premium, ya advertimos que a nivel de contenido y calidad los márgenes de la productora estaban ampliándose a toda velocidad, y que lo que había empezado como una respuesta a las competidoras de la industria nacional iba camino de salirse de los gráficos y rivalizar con la Champions League del porno internacional para internet. Nos alegra decir que no nos equivocábamos: Let’s Doe It es el rebranding y la remodelación que plasma el salto de escala en una compañía que busca utilizar los mismo manierismos del porno americano y aplicarlos a la producción europea y que, a la vista está, ha dado con una mezcla que desemboca en algunas de las mejores escenas gonzo del mundo.
Como suele ser habitual en toda productora, el talento masculino se repite más a menudo que el femenino, y fijándose en esas constantes uno puede establecer qué estilo y qué cantera dicta con más influencia la agenda de contenido de Let’s Doe It. Mike Angelo, Jason Steele, Lutro, Alberto Moreno o Max Cortés son garantía de mujeres rusas, centroeuropeas y también españolas, y por eso la presencia de Francys Belle, Alexa Tomas, Susy Gala, Apolonia Lapiedra, Amirah Adara o Nancy A, auténticas diosas del porno a esta orilla del Atlántico, suma enteros al catálogo de vídeos a nivel de calidad, compromiso y prestigio. Por si esto fuera poco, entre las no pocas actualizaciones semanales (rondan las cinco cada siete días) también se cuelan a menudo escenas rodadas al otro lado del charco y con starlets norteamericanas de la talla de Karma Rx, Kenna James, Abella Danger, Abigail Mac, Gina Valentina o Lana Rhoades. La selección es irreprochable.
En cuanto a la presentación, el portal ronda las tres docenas y media de sites temáticos donde dividen por categorías, prácticas y estilo el flujo enorme de contenido que va entrando, con cada vídeo retransmitiéndose en una sesión de streaming rapidísima y con el tope de resolución en 1080p (quizá se les podría reprochar que no hayan saltado ya al 4K, pero todo se andará), y un magnífico sistema clásico de clasificación por protagonistas, categorías y tags. Incluye una función de descarga de vídeos a alta velocidad que permite bajarse hasta ocho escenas al mismo tiempo cubriendo todo nuestro ancho de banda. Por ponerle algún pero: quizá el motor de búsqueda podría ser un poco más completo, ya que es una búsqueda simple y no permite utilizar filtros, que con el volumen de contenido que maneja el catálogo de LetsDoeIt sería bastante de agradecer.
Quizá lo más destacable de LetsDoeIt, y que es un rasgo que ya era definitorio cuando se llamaba PornDoe Premium, es la capacidad del portal para amalgamar y agrupar contenido de distintas partes del mundo, como si con una sola suscripción pudieras acceder a porno español (Las Folladoras), alemán (Bums Besuch, Hausfrau Ficken, Deutscheland Report), francés (Casting Francais, La Cochonne) colombiano (Carne del mercado, Narcos X) o italiano (Casting Alla Italiana) o también disfrutar de categorías específicas como porno en lugares públicos (Chicas Loca), con actrices transgénero (Trans Taboo, Transbella) o incesto (Kinky Inlaws). La gran baza de LetsDoeIt es que tiene contenido exclusivo que de otro modo sería imposible descubrir (sus sites con pornstars colombianas son especialmente valioso porque allí exhiben talentos que quizá nunca volveremos a ver en otra productora) distribuido en una variedad asombrosa y pensada para satisfacer tanto a los pornófilos de gustos cambiantes como a los que se aferran a un solo tipo de porno y no lo sueltan jamás.
A falta de afinar las búsquedas avanzadas y quizá de ofrecer un poco más de información y contexto en las fichas biográficas de las pornstars, pero con una mejora evidente en la calidad de las escenas durante los últimos dos años, no es descabellado especular que con LetsDoeIt quizá estemos ante la productora más completa de Europa. Desde sus cuarteles ibicencos, Letsdoeit nos ofrece un amplio catálogo de porno variado, cuya popularidad no para de crecer y que merece la pequeña inversión que supone registrarse en su página.
