Una de las pornstars que nunca nos cansaremos de ensalzar a pesar de que jamás ha logrado la atención de otras de su generación es sin duda Syren Demer. La MILF cumplirá este año los 50 y solo se explica que se le haya privado de la gloria por tener unas facciones quizá poco cercanas al ideal de belleza de las maduritas de la industria, que suelen ser bastante parecidas entre sí, o puede que sea por la cicatriz de cesárea que lleva en el vientre; no lo tengo claro. Si uno baja por su cuerpo, eso sí, se encuentra con algo de Syren de lo que nunca se habla: posee un culo absolutamente glorioso, de esos que no son fruto del ejercicio o la cirugía sino de la genética, de haber desarrollado unas caderas anchas y unas posaderas poderosas. A nivel de implicación ya no hace falta ni hablar: atentos a este reciente gangbang interracial para Dogfart, que habla por sí solo.
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