Creo firmemente que la libertad sexual es un derecho, cada quien debe ser libre hacer lo que quiera con su cuerpo, y si así lo ha decidido tener la libertad de ejercer la prostitución, dedicarse a la venta de material erótico o pornográfico, pero siempre por convicción. Que quede claro siempre que estoy en contra de la trata de personas o de cualquier tipo de abuso. Diariamente decenas de chicas y chicos de todo el mundo incursionan en el porno, unos por curiosidad, por dinero o por convicción, sin embargo hay muchas cosas que nadie habla acerca del porno, he visto que cada día hay menos canales que hablen de lo que ocurre detrás del porno, sólo algunos medios americanos como AVN, Fleshbot o algunos colegas que entrevistan a las actrices. Si a esto le sumamos que las redes sociales cada día censuran más el contenido porno y que los blog de opinión de sexo cada día somos menos localizables.
Hoy quiero escribir un artículo que ayude a alguien que está buscando incursionar, pero tiene dudas al respecto, de cómo hacerlo, y cuales son las consecuencias de esta importante decisión. No queremos persignarnos o decir que no es una buena opción. Hay muchos actores y actrices que encontraron en la pornografía su modo de vida y viven felices con ello.
1.- Pornstar para toda la vida
No importa que te retires, un(a) pornstar lo es para toda la vida sólo que en estado de retiro. No hay vuelta atrás, toda la gente siempre te recordará por tu actuación en el escenario pornográfico. Siempre se es actor o actriz porno, sólo que en activo o en retiro. No es algo que se pueda borrar del expediente, sin embargo no hay un plan de jubilación, te queda el puesto honorífico pero no las prestaciones sociales. Mia Khalifa entró pensando que nadie de su familia y amigos se enteraría y hoy es una de las actrices porno más famosas del internet. Sin embargo puedes cuidar tu identidad, muchos actores amateur optan por usar máscaras o bien mantener su identidad como Leolulu o Mini Diva.
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2.- La sociedad juzga demasiado a los trabajadores sexuales
Un día fui a un table dance en la Ciudad de México en compañía de una amiga que es actriz porno, ella nunca había ido a uno y tenía una duda: ¿por qué si había tantas chicas tan bonitas en el lugar casi no hay actrices porno en México? le preguntamos a una de las bailarinas, si sería actriz porno, nos contestó que no. La respuesta es simple, el problema no es el trabajo sexual, el problema en muchas sociedades es la estigmatización. Hay muchas personas en el mundo realizando la diversos trabajos desde eróticos hasta sexuales, muchos y muchas estudiantes se dedican a muchas cosas relacionadas, desde ser Sugar Babies hasta llevar su canal de Only Fans, muchas tratan de no divulgarlo. Hay ejemplos de profesores y otros profesionales que han sido despedidos al enterarse sus jefes de cuál ha sido o es su segundo trabajo.
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3.- Los ingresos no son fijos
A pesar de que en una escena se pueden ganar varios cientos de euros o dólares es un empleo que requiere rodar con mucha frecuencia para poder tener ingresos estables, algo que menciona Bianka Blue en entrevista. Las actrices con contratos de exclusividad son muy pocas, y es muy difícil y cansado mantener un ritmo alto de rodajes que te permita realizar varias escenas al mes.
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Muchos actrices o actores complementan sus ingresos con otros oficios, que van desde la prostitución, venta de productos, show de strippers, hasta los webcams y canales propios de contenido porno amateur.
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4.- Hay muchos gastos
Los actores y actrices tienen que cubrir muchos gastos que no son pagados por la compañía, como lo son gimnasio y cirugías, incluso las pruebas para detectar posibles enfermedades de transmisión sexual corren por cuenta del actor y estas sólo tienen una vigencia de 14 días. Hay que viajar mucho de un destino a otro para poder grabar con regularidad y aunque las productoras absorben algunos gastos, siempre habrá gastos no previstos.
5.- El porno NO es una catapulta al estrellato en otros ámbitos
Salvo algunos ejemplos como Cicciolina o Moana Pozzi que llegaron a ser incluso diputadas en su país, o actores como Jordi ENP que además es influencer, es muy difícil forjarse una carrera artística ocupando la fama del porno. Actrices que han buscado dedicarse a la actuación, canto u otros escenarios, rara vez logran posicionarse o alcanzar la fama. La realidad es que muy pocas marcas apostaría en patrocinar un programa con alguien que anteriormente fue actriz o actor porno.
Es muy común que exista la creencia y lo he escuchado de algunas pornstar que dicen esto es temporal mientras ocupó la fama para entrar a la TV, cine u otros medio de manera convencional. La realidad es que la sociedad estigmatiza mucho a las actrices porno en retiro y el camino es muy difícil.
6.- Es un trabajo que dura unos cuantos años
Sí, ya sé, dijimos que es para toda la vida pero sólo el nombramiento, en cuanto al pago sólo durará unos años, una actriz promedio sólo durará unos 5 años en el medio, claro que hay chicas que llevan décadas y decenas de escenas pero son las menos. En el caso de los hombres puede ser que seas contratado más tiempo si tu miembro lo permite, algunos actores como Rocco Siffredi tienen más de 34 años rodando.
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El público deja de consumir escenas de actrices que han sido demasiado vistas, por lo que está industria está en búsqueda constante de nuevos talentos y en poco tiempo se agotan las posibilidades de realizar nuevas proezas y/o posiciones que quieran ser contempladas por un público relevante.
7.- Es una vocación
No buscamos espantar a nadie, ni decir que ser actor o actriz porno sea malo, al contrario, respetamos la profesión y tenemos muchas amistades trabajando en el ramo y son excelentes personas, muchos de ellos y ellas son muy felices en esta gran industria. Sin embargo hay muchas personas que ingresan a este mundo, sólo por el dinero, o por el morbo y terminan retirándose en poco tiempo y maldiciendo a toda la industria, hay que ser muy maduro al declinarse por iniciar una carrera en la pornografía.
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