Siempre nos gusta destacar ese tipo de escenas en las que profesionales que llevan varios años trabajando en la industria del porno se ven las caras por primera vez frente a la cámara. Hace unos meses sucedió exactamente eso entre Dana Dearmond, reputadísima starlet de 36 años que lleva más de una década enrolada en el negocio y a la que hemos visto envejecer ganando atractivo con los años, y Mandingo, el hiperpolludo de Mississippi que debutó en 1999 y sigue dando guerra como si nada. En todo este tiempo jamás se habían cruzado hasta que West Coast Productions puso los medios en White Cougar Black Lust y nos demostraron que, vista la química y la complicidad del encuentro, quizá sí habían tenido sus más y sus menos fuera de plano.
Cuando Dana Dearmond encontró a Mandingo
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