La diversidad sexual es el punto fuerte de Kink, un lugar en el que todas las prácticas con todos los géneros son bien recibidas y retratadas, pero si de algo nos podemos quejar es de su diversidad racial. Y no es totalmente culpa de ellos: por algún motivo las señoritas de raza negra que deciden entrar en el porno no suelen tener inquietudes muy extremas o tendencias sadomasoquistas.
Hay honrosas excepciones, afortunadamente, y una muy interesante es la guapísima Lisa Tiffian, una voluptuosa californiana de 26 años que hace un poco de todo en el porno, pero sus participaciones en Kink son mucho más numerosas que con el resto de compañías. Su nicho favorito es la lucha libre lésbica de Ultimate Surrender, pero hace unos días sometió su curvilíneo cuerpo al castigo de Hardcore Gangbang y vimos el cielo abierto para traerla por aquí.
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