En una entrada publicada recientemente (Presentando a la guapa y menuda teen madrileña Ohana Petite) incluimos una escena con otra flaquita europea, eslovaca para más señas, que se distingue también por su escasez de curvas, pero con un apetito anal más que considerable. Se trata de Sasha Kray, otra “Olivia” más del porno que, si bien rueda poco, cuando lo hace, no se pasea precisamente por los sets de rodaje, sino que tiene la capacidad de dar cobijo a miembros a pares hasta en su trasero, lo que vuelve a evidenciar que la fragilidad de ciertas chicas que se enrolan en el porno es solo aparente, y nada tiene que ver con el asombroso aguante de sus cavidades corporales. No obstante, hoy la vemos en un par de encuentros sexuales más convencionales (chico/chica).
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