Jasmine Sherni pretende hacer algo de ruído en la industria siguiendo el modelo de la archiconocida y sobrevalorada para muchos Mia Khalifa. No es precisamente una jovencita que acaba de asalir del nido, puesto esta nativa de Luisiana de origen paquistaní tiene 32 años, aunque solo lleva unos meses en el gremio que nos ocupa. Anteriormente era enfermera de urgencias, pero ha decidido dar un giro drástico a su vida pasada la treintena. El poderoso caballero don dinero siempre es el responsable en este tipo de cambios profesionales.
En este sentido, Mia Khalifa sigie siendo el arquetipo de las actrices de Oriente Medio, incluso después de que escupiera en el plato que le dio de comer minimizando el papel del porno en la consecución de su fama y éxito. De hecho, la libanoestadounidense sigue siendo parte esencial del disco duro de onanistas de todo el planeta. Jasmine, que no es estúpida, intenta tomar el relevo en el nicho de la controversia y el porno velado. Pero el factor sorpresa ha disminuido, aunque intentan exprimir la gallina de los huevos de oro colaborando con otras señoritas exóticas como The Official Egypt, Hoy Girl Slay o Sarah Arab, en algunos lanzamientos por cuenta propia. No hace falta ser Nostradamus para saber que el impacto entre el público es y será menor por muchos factores.
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