Eva Angelina fue una de las pornstars pioneras en eso de explotar el aire de chica intelectual en sus escenas, puesto que lucía gafas de pasta muy a menudo en sus encuentros sexuales en pantalla, adoptando tanto el rol de profesora cachonda como el de estudiante aplicada que se desata en la cama. Era tan habitual su look con gafas, que en una ceremonia de los AVN Awards los asistentes no la reconocieron sin ellas.
Originaria de Huntington Beach, California, Eva Angelina tiene herencia cubana, china, irlandesa e inglesa. Su familia era acomodada, pero sufrieron un grave revés económico cuando Eva tenía 13 años. Según confesó ella misma, ya por entonces fantaseaba con convertirse en actriz porno. De hecho, a esa temprana edad hizo sus primeras grabaciones caseras. Así que tres meses después de cumplir los 18 años se inició en el mundillo, algo que no sorprendió a su entorno más cercano, puesto que Eva era conocida por su promiscuidad. Como dato revelador, su padre le llamaba ninfómana cuando solo tenía 14 años.
La precariedad económica ya no era un problema para Eva Angelina, que encontró en el porno una salida profesional ideal a nivel personal y lucrativo. Por supuesto, su belleza y su hermosa figura le sirvieron para impulsar su carrera, con una talla 80 de senos que se encargó de elevar hasta la 100.
Una trayectoria de más de 15 años en la industria (897 escenas) demuestra la vocación pornófila de esta pequeña y miope californiana, aunque su carrera no estuvo exenta de varapalos, con varias idas y venidas, el suicidio de su primer novio formal y una relación tormentosa —con supuestos malos tratos de por medio— con el también actor porno Danny Montain, que dio como fruto una hija. El punto culminante de la carrera de Eva fue su galardón como mejor actriz en los premios AVN y XBIZ del 2008. Diez años después pasó a formar parte del Salón de la Fama AVN. Las últimas noticias que tuvimos de ella es que recondujo su carrera como agente inmobiliario.
Su primera escena
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