Chris Strokes
Criss Strokes entró en el porno por puro aplastamiento. No necesita talento, ni actitud, ni cantidades especiales de trabajo porque la genética y el azar le han regalado un pollón descomunal tanto en longitud como en grosor. De hecho sus compañeros en Brazzers, donde trabaja habitualmente al margen de cositas sueltas por ahí, le llaman “el antebrazo”, y os aseguro que no lo dicen porque sus antebrazos sean especiales. Su juventud, su buena planta (mide 1,90) y su cuerpo musculado pero fibroso le han ayudado a convertirse en un actor porno de primera fila al que no le ha faltado trabajo desde que empezó con solo 21 años, y aunque seguramente el día que se retire no va a quedar como una gran estrella que todos recuerden, a él que le quiten lo bailado: se ha follado a la flor y nata de la industria.