Las escenas con masajes eróticos abundan en el porno, pero suelen ser realizados por una chica a un chico o viceversa. En este caso se trata de una masaje a dos bandas llevado a cabo por una escultural joven, que ve a una pareja de amantes dormida y les hace tocamientos a ambos, rezumando erotismo y encendiéndolos hasta límites insospechados.