Profesora tetona recibe una buena follada de su alumno preferido

Un servidor tenía una profesora de geografía que me traía por la calle de la amargura, y no en el plano estudiantil precisamente, sino que andaba todo el santo día fantaseando con follármela. Y es que ni yo ni mis compañeros podíamos resistirnos cuando venía a clase con sus vaqueros ajustados y sus grandes tetas susurrándonos: comedme.

Hola, usamos cookies. Si continúas navegando, aceptas nuestra política de privacidad.