Naomi Russell
De ascendencia israelí y eslovaca, esta fanática del sexo llegó al porno tras una dura temporada como pluriempleada en un bufete de abogados y por las noches como auxiliar de enfermería, época en la que además contrajo un cáncer que superó felizmente. Quizá fue algo tan traumático lo que empujó al más desinhibido disfrute a una mujer que jamás había practicado sexo anal ni se había dado un beso en la boca con otra dama.
Sapientísima y experimentada ahora en ambas prácticas, se ha convertido en una de las mayores reinas del anal (al nivel de Sheena Shaw, Ashley Blue o Sasha Grey) de los últimos años, una modalidad que disfruta al máximo cada vez que la ejecuta y un placer que, afirma ella misma, le debe a la industria del porno.